El que ríe el último, ríe mejor, dicen por ahí. Y esta vez no voy a ser yo, me temo.
Pues ayer no sabes qué me pasó. Fue el peor día de mi vida.
La manía, o el gusto, por cacharrear, y abrir, tocar, modificar, ... las cosas me ha llevado a donde estoy ahora: no funciona internéeeeeeeeeeee.
Parece que he matado a mi router con una fallida actualización del firmware. No responde, no me llama, no me escribe, no todo. Así de sencillo. Ciao, bye-bye, auf wiedersehen, sayonara, "hasta la vista, baby".
Tras intentar salvar el tipo con otro router que tenía por ahí tirado (al que me parece que también he matado) he tenido que llamar al servicio técnico. Sorpresa 1: soy cliente preferente. Sorpresa 2: contestan a la primera. Pero una batería de móvil agotada (como siempre, en el peor momento) acaba con la conversación antes de que pueda terminar de explicar el problema. Así que, ahora con el putomóvil enchufado, llamo al servicio técnico one more time.
Encienda y apague el router, acceda a la 192.168.1.1, resetee el router, acceda de nuevo a 192.168.1.1, resetee el router, resetee el router, resetee el router, ...
¿Quién anda ahí?
Y cuando la cosa ya parecía que iba a durar ad infinitum... vamos a hacer una consulta para abrir una incidencia de sustitución de router.
¿Vienes a por mí? ¿Quién te envía?
Pero esta vez la conexión no va a volver sola. Más bien va a tardar unos cuantos días.
Ayyyyyyyyyyyy... Internéeeeeeeee...... Internéeeeeeeeee.....
viernes, 8 de febrero de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario